Al Norte de Bogotá, hay un colegio femenino que colinda con la montaña que marca el oriente de la ciudad. En el medio hay un edificio imponente de forma angulada, que se erige al final de unas altas escaleras de peldaños cortos, que siempre están bordeadas por hortensias.

Unos treinta escalones arriba, seis puertas de vidrio dan ingreso al recinto. Un espacio poblado por hileras perfectas de bancas de madera clara, acondicionadas con espaldar y reclinatorios. Grandes ventanales a ambos lados dejan entrar la luz que invade el espacio, dejando en evidencia pequeñas partículas de polvo, que siempre están suspendidas en el aire. 

El silencio recorre la pasarela central entre las bancas, hasta encontrarse con un altar, un atrio de piedra blanca, y una cruz que lo observa todo de manera vigilante, protegiendo una caja dorada, pomposa, llena de vino y hostias.

GENESIS 3:16

A la mujer dijo:

En gran manera multiplicaré

tu dolor en el parto,

con dolor darás a luz los hijos;

y con todo, tu deseo será para tu marido,

y él tendrá dominio sobre ti.

Al lado izquierdo está María en una estatua tamaño real, quien designada por la cruz, dio a luz con dolor a su hijo, que cubriendo el flanco derecho está representado en forma de estatua sufriendo eternamente colgado de la propia cruz y coronado con espinas.

{Ejercicio: Describir un espacio de la infancia}